23 Dic ¿QUÉ SIGNIFICA SER PROVIDA Y PRO-FAMILIA?
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POR: ARQ. CARLOS MARTIN QUINTERO ORCI
El término provida se viene escuchando desde por allá en los años 70, para definir a los movimientos que surgieron para oponerse a la cultura de la muerte que en ese entonces, bajo la presión de entidades internacionales y con el apoyo de los gobiernos locales, estaba tomando fuerza. En años recientes, la manipulación de la semántica que caracteriza a los movimientos de izquierda, ha comenzado a etiquetar mañosamente a los movimientos que se oponen al aborto con los negativos términos de “anti-aborto” o “anti-choice”, para hacerlos ver como que están mal.
Hay quienes, para desacreditar a los movimientos provida, afirman que sus partidarios “argumentan que la vida humana comienza en el momento de la fecundación, y que la muerte no debe ser un proceso asistido, por lo tanto consideran al cigoto, al embrión y al feto como vidas humanas”. Pero no hay peor ciego que el que no quiere ver. Que la vida humana comienza en el momento de la fecundación es más que un simple “argumento”. Es un hecho demostrado científicamente, y por lo tanto, sea cigoto, embrión o feto, ES un ser humano.
Y ante la imposibilidad de negar el derecho a la vida que tiene todo ser humano por el sólo hecho de serlo, los partidarios de la cultura de la muerte plantean argumentos (aquí sí cabe el término) descabellados, como el de que la vida humana comienza al nacer, o de que se está vivo cuando los padres quieren al bebé, etc. Estas ideas no plantearían mayor problema si no hubiera gente dispuesta a creerlas.
Incluso, en un artículo publicado por una conocida socióloga norteamericana, esta afirma que “la vida de un organismo animal comienza, obviamente, en la concepción. Pero la vida humana sólo comienza en el momento en que el animal (así lo llama ella) tiene una mente. En algunos que se desarrollan rápido, esto puede suceder antes de la edad de un año; en la gran mayoría de los casos, esto ocurre entro los dos y los tres años de edad”. O sea que, según afirma ella en otra parte del artículo, el hijo se transforma en un ser humano sólo cuando desarrolla el lenguaje u otros sistemas simbólicos.
¿Y qué es lo que piensa un provida? No puede llamarse provida quien dice estar en contra del aborto, pero no tiene inconveniente en utilizar anticonceptivos o limitar el número de hijos por razones egoístas. Provida es quien asume un compromiso total en favor de la vida y la dignidad de la persona en cualquier circunstancia y etapa de la vida, por lo que obviamente no puede estar de acuerdo con lo que sea opuesto: el aborto, el uso de anticonceptivos (algunos de los cuales en realidad son abortivos), el suicidio asistido, la eutanasia (a la que, eufemísticamente, llaman “muerte digna”), etc. Un verdadero provida también está a favor de que las personas vivan en condiciones laborales, de salud, económicas y sociales dignas.
Y ser pro-familia es estar del lado de cualquiera de las formas de la verdadera familia: padre, madre e hijos; padre o madre que cría sólo a sus hijos porque el cónyuge falleció o abandonó el hogar; tíos que crían a sobrinos por haber fallecido los padres de estos; esposos con hijos adoptivos; etc. No son, en cambio, familias aquellas que están conformadas tan sólo porque la ley reconoce como “matrimonios” a uniones que son de suyo antinaturales, producto de un desorden psicológico.
Para el pro-familia también es importante el compromiso total con esta forma de pensar, ya que en estos días, por razones ideológicas impuestas por intereses políticos o económicos, no es fácil manifestarse de esta manera, porque cuando una persona lo hace, aunque sea en forma seria, discreta, respetuosa y fundamentada, es común que se tope con intolerancia y hasta actitudes fanáticas que lo acusan, así nomás como así, de “discurso de odio”, promoviendo boicots en su contra y exigiendo que la ley lo castigue.
Por eso hacen falta, hoy más que nunca, personas valientes, sólidamente formadas moral y científicamente, que no se dejen amedrentar por la tormenta y estén dispuestos a dar testimonio de la verdad.
Y a propósito de vida y familia, dentro de unos días celebraremos el nacimiento del Niño Dios, y el día 30 la Sagrada Familia. Que tengan todos una muy feliz navidad. Y que también tengan un feliz año nuevo.
Alguien, de manera pesimista, dijo alguna vez: “brindemos para que este nuevo año sea igual de malo que el anterior, para que no esté peor”. Yo prefiero ser más optimista, esperando que este nuevo año 2023 sea mejor para todos nosotros. Que Dios bendiga a México.
Carlos Martín Quintero Orcí
Puntos curriculares:
*Arquitecto con experiencia en todo tipo de proyectos.
*Colaborador de INCIDE desde el 2001.
*Historiador aficionado de la ciudad de Hermosillo.
*Escritor en diferentes medios acerca de diferentes temas.
*Fotógrafo del paisaje y de la construcción.
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