03 Dic Igualdad Sustantiva
Escucho con atención y me preocupa el paquete de iniciativas que están por proponerse para que sean ley en un futuro no tan lejano, pero más me asombra lo poco que como sociedad, como padres de familia o como medios de comunicación comprendemos de este asunto y que, al escuchar este llamamiento social que hace Monseñor Ramón Castro, Obispo de Diócesis de Cuernavaca y Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano, considero oportuno sea tomado en cuenta y del cual transcribo casi en un 99% de fidelidad con lo mencionado en el video que circuló por múltiples redes sociales y que creo plasma en poco más de 4 minutos, el verdadero sentir de la gran mayoría de mexicanos, pero que no se han dado cuenta de la gravedad de la situación:
“Queremos manifestar al pueblo nuestra gran preocupación tenemos conocimiento que nuevamente desde el Congreso de la Unión se quiere proponer un paquete de iniciativas que bajo el concepto de igualdad sustantiva pretenden reformar un importante número de artículos de la constitución de una serie de leyes reglamentarias sin haber atravesado por un proceso de consulta suficientemente amplio y riguroso.
Los legisladores pretenden introducir modificaciones sustantivas al régimen constitucional y legal en México con impacto en múltiples ámbitos, civil, familiar, penal, administrativo, sin el debido consenso y fundamento técnico, vulnerando y restringiendo los Derechos Humanos a la vida, a la familia, a la libertad religiosa, de conciencia y de expresión.
Es un país sumido en la violencia, inseguridad que ha cobrado decenas de miles de muertos en los últimos años, se pretende afianzar la cultura de la muerte, estableciendo como pretendido derecho humano la práctica del aborto, bajo el supuesto de proteger la salud sexual y reproductiva con un espíritu autoritario y regresivo.
Se pretenden establecer prohibiciones, restricciones y limitaciones a la libertad de religión, de conciencia y de expresión, vulnerando la protección prevista en los tratados internacionales que impiden la censura previa. Así se pretende impedir a los creyentes de todas las religiones, la manifestación de su doctrina y cuerpo de creencias religiosas en temas como la vida, el matrimonio, la familia, sexualidad humana, siendo perseguidos por su predicación y denuncia profética.
Esas reformas conllevan prohibiciones restricciones y limitaciones a los padres y madres de familia en el ejercicio de la patria potestad, incluyendo el derecho a educar a sus hijos, imponiendo una determinada ideología a la educación pública y privada.
Por ejemplo, existe la propuesta para no requerir el consentimiento de los padres de familia para que un menor recurra a la práctica del aborto o a un procedimiento de cambio de sexo sea hormonal o quirúrgico.
También se pretende la reconfiguración del matrimonio y de la institución familiar imponiendo una visión que no responde ni obedece a la realidad y al contexto sociocultural de México.
Como una manera de ir en contra del pueblo, que tiene profundo raigambre y tradición familiar, el proceso legislativo que se está siguiendo pretende aprobar una serie de reformas que deberían requerir un estudio técnico de fondo, por separado y con amplia participación social.
Expresamos nuestra grave preocupación, porque en medio del clima de violencia y crisis económica que afecta al pueblo de México, estas iniciativas dividen, fracturan y polarizan a una sociedad que requiere con urgencia unidad para construir la paz, reconstruir el tejido social y alcanzar el bien común el atentar de esta manera es otra forma de violentar el país.
Pedimos qué tratándose de una reforma constitucional y legal de esta magnitud con implicaciones tan amplias para los derechos humanos de la sociedad mexicana, se convoque a todos los actores sociales a participar en diálogo abierto que lleve a una reflexión seria, en donde el pueblo tenga la oportunidad de expresar su sentir sobre temas tan sensibles.
Pedimos que la vida, la infancia, la familia, las libertades de religión y de expresión sean respetadas en todo México”
Son tantas las aristas, tantos los lados que analizar que no puede ni debe ser unilateral, con el pretexto de “hacer el bien” se hace un mal mayor, bajo un engaño planeado, disfrazado mediáticamente y sin ser sometido a una consulta pública. Existen múltiples recursos que como sociedad podemos echar mano, pasando de las manifestaciones, protestas y desplegados. Tenemos los mexicanos que hacer valer ese derecho humano que a ser consultados.
Ya es tiempo del equilibrio social y político, debemos acortar el regreso del péndulo, basta de quedarnos de brazos cruzados y de ser simple espectadores, en este circo sin jaula que nos proteja de las fieras que andan sueltas y sin malla que los proteja incluso a ellos, de sus constantes yerros.
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JESUS GUILLERMO MORENO RIOS
Ingeniero civil con maestrías en Administración de la Construcción y Protección Civil.
Académico universitario, empresario y comunicador.
Especialista en Gestión de Riesgos y en Seguros de Responsabilidad Civil.
Coordinador de la RED Profesional por los derechos Humanos
Presidente y fundador del Consejo INCIDE, A.C.