CUANDO EL DESTINO NOS ALCANCE - INCIDE
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26 Feb CUANDO EL DESTINO NOS ALCANCE

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Este fue el título en español de una película (Soylent Green en su versión original) de 1973 y protagonizada por Charlton Heston; me interesa por hoy solo el título y hacer referencia a que los futuros distópicos, los opuestos a los mundos utópicos donde nos imaginamos confort y bienestar.

Entonces, la distopia presupone el caos, la sociedad indeseable, el mundo colapsado en todos sus sentidos, mientras que nuestro presente tiene el potencial de discriminar y corregir las acciones que nos lleven hacia el abismo o hacia la bienaventuranza, no en su forma teológica, sino de una sociedad que goza y aprovecha racionalmente su entorno y los recursos de nuestro planeta. Entonces donde queda la resiliencia empresarial, donde entra el mundo de las finanzas de previsión, tales como seguros, pensiones, fianzas y, sobre todo, cuál es su impacto social, si no existieran esos mecanismos de gestión del riesgo.

Imaginemos un mundo donde no existieran esos mecanismos de seguridad futura, un lugar en el tiempo donde el empresario no quisiera poner su inversión en riesgo pues no hay garante que quisiera responder por ante la incertidumbre y la pérdida. No se sembrarían alimentos, no habría incentivos para construir nuevos edificios o casas, se dejarían de comprar autos y camiones. Nadie quiere exponer su respaldo económico en caso de daños.

En los sistemas médicos, hospitales y medicamentos; que sucedería con aquellos que, teniendo la posibilidad económica de apostar su salud contra un cargo anual de pronto no encontrasen quien aceptara administrarles ese riesgo, que es la base para contratar mejores precios y especialistas, de dar certeza a que se desarrollen procedimientos y maquinarias que coadyuven en devolver la salud.

El trabajador no encontraría donde depositar fondos que le retornen oportunamente en ese futuro la economía que será su medio de subsistencia, no habrá capacidad de ahorro propio o grupal.

 

En un mundo donde no se estimula la inversión con riegos compartidos no hay incentivo para producir nada, para crear nada, para edificar algo; si no hay de recuperar el ahorro y la inversión quien querría asumir riesgos, dar mantenimientos a sus bienes, colaborar con otros y pretender que socialmente se tengan oportunidades si nadie quiere exponer nada.

Es hermoso pretender ser una sociedad resiliente, que se puede anticipar al desastre, a la adversidad, que hoy tiene mecanismos que más o menos aceitados hacen frente al clima, a las enfermedades, al tremor de la tierra y a las vicisitudes de lo predecible (como un incendio) pero imposible de saber en quien se actualizara.

La pandemia del Covid es un vivo ejemplo de como el ser humano demuestra su capacidad de resiliencia y adaptación, habrá afectación económica y social (y mucha), pero los momentos de crisis también son de oportunidad para otros. Se generará una nueva dependencia a vacunas y en el proceso se experimentarán medicamentos y procedimientos clínicos que abrirán para unos crecimiento en conocimiento en salud y, gran parte de esa economía está siendo aportada en gran parte por aquellos que tenían planes de salud.

Pero resiliencia social es prever que hoy el flagelo se llama Covid, mañana será otro virus, o una bacteria, o un hongo y que podemos promover e incentivar todos los actos para contener anticipadamente el surgimiento de esas enfermedades, para ello se necesita conocimiento, inversión, interés social y empresarial. Se necesita compromiso y capacidad de transferir los riesgos y sus consecuencias económicas mediante mecanismos financieros; pero también es indispensable que el Estado, como órgano rector entienda que es uno de los primeros promotores de certidumbre, de resiliencia y que debe actuar para el bien común, basado en el interés de sus gobernados y especialmente, de las generaciones venideras.

De lo contrario lo que estamos favoreciendo es que se actualicen esos futuros distópicos donde nuestros descendientes dirán: Nos alcanzó el destino.

Carlos Zamudio Sosa

Claims Manager

México Claims and Risk Management SC

Desde 2005 brinda servicios de consultoría “Risk Management” externo con atención a Asegurados en preparación para Inspección de Riesgo, análisis de contratos y control de sus licitaciones; asesor para acreditación de daño físico y consecuencial por siniestro por acompañamiento, asesoría y defensa técnica y jurídica por reclamos asegurados o afianzados.

Ha acreditado diversos cursos en diversas materias afines al Riesgo y la valuación del Daño Material, incluyendo terminar estudios de nivel
Maestría de Daños y Ajustes. Ha co-impartido 6 Diplomados en temas selectos de Gestión del Riesgo y Seguridad Industrial y acreditado ante la STPS.

Expositor invitado en Seminarios y Talleres y otros programas de desarrollo personal en seguros y colaborador para medios impresos y electrónicos especializados en Seguros y Fianzas.

52 662 212 30 48 Of
            171 03 55 Cel

Linkedin: https://www.linkedin.com/in/carlos-zamudio-sosa-6a67a922/

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